lunes, 9 de junio de 2008

Una vuelta muy costosa

Un campeón a toda “maquina”

El 33 no solo va a ser conocido ahora como “la edad de Cristo” si no que también por el título que River acaba de conseguir. Tras cuatro años de frustraciones en las cuales no se logro ningún campeonato hoy se pudo cerrar esa página amarga en la historia del club.
El millonario ganó 2 a 1 a Olimpo y gracias al empate que Colón de Santa Fe logró como visitante frente a Estudiantes los dirigidos por Diego Simeone se quedo con el Torneo Clausura 2008. Diego Buonanotte comenzó a darle alegría a la gente cuando a los 15 minutos marcó el 1 a 0 luego de un tiro libre que jugaron en corto Ariel Ortega y Matías Abelairas. River fue más y dedicó el tiempo restante a aprovechar los contraataques que le podrían quedar, el “Burrito” fue clave para tener la pelota y crear pero no se pudo llegar a marcar un tanto más. Así termino el primer tiempo y ya se escuchaba “Y si señores yo soy de River y si señores de corazón que este año de acá de Nuñez salio un nuevo campeón”.
La segunda etapa comenzó muy distinta, esto era obvio por que Olimpo necesitaba ganar para intentar salir de la zona de peligro. Y así fue, los visitantes se pararon mejor el entrenador Florit hizo ingresar a Ulloa por Leandro González para aprovechar el juego aéreo y Simeone puso a Augusto Fernández por Sebastián Abreu para tener la palota.
A los 21 minutos Josemir Lujambio controló la pelota dentro del área y sin fallar disparo al medio del arco marcando el 1 a 1. Este gol se grito mas en el Estadio Único de La Plata por que todavía se veían con chancees de alcanzar a River, pese a que Estudiantes seguía 0 a 0.
Los de Nuñez estaban obligados a meter un tanto mas para ser campeón y 12 minutos después de ese gol de Olimpo otra vez Buontanotte, que se consagra como máximo goleador del equipo, le dio la victoria definitiva a River por 2 a 1.
Collado terminó el partido y los jugadores millonarios debieron esperar unos minutos más para festejar. Cuando llegó desde La Plata el empate en 0 de Estudiantes los jugadores y la gente rompieron en gritos y festejos que hace cuatro años venían guardándose. Aquella vez fue de la mano de Leonardo Astrada, hoy con Simeone de técnico Y Ortega como máximo estandarte.

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